miércoles, 27 de mayo de 2009

¿Comunicación?

Las últimas polémicas políticas locales, alguna de ellas bastante ficticia por cierto, denotan en común en su origen una cadena de fallos que surgen de la escasa por no decir inexistente política de comunicación del Gobierno Municipal de Gandia.
Y es que si se analiza lo sucedido por ejemplo con el caso de las obras de la Avenida República Argentina, cuya importancia para el tráfico de la ciudad y sobre todo por el impacto sobre los comerciantes del sector, se verá que esos trabajos estaban previstos para junio, que se adelantaron en previsión de males mayores para no tener que actuar sobre el antiguo párking (acabado hace 12 años) con la amenaza de la temporada de lluvias en octubre. Ese adelanto se decidió de un día para otro y, de hecho, se convocó a reuniones a vecinos y comerciantes sólo unos días antes del comienzo de los trabajos.
La reacción de un grupo reducido de comerciantes estuvo a punto de generar un conflicto que se recondujo a duras penas por los responsables municipales y técnicos presentes en la reunión.
Es más, al día siguiente la filtración de la noticia del inicio de obras, cuando se había abierto un “impasse” en la negociación con los comerciantes, generó mayor rechazo aún.
El PP de Gandia no desaprovechó la oportunidad de pescar a río revuelto y, con su habitual tono catastrofista, que igual sirve para denunciar hechos supuestamente graves como para la menor de las historias, y se apuntó al carro del “caos” en que estaría sumida la ciudad según su punto de vista.
El Gobierno municipal ha tardado hasta este miércoles en dar una respuesta que ya tenía clara desde la noche del pasado viernes: hay acuerdo con los comerciantes. Las obras se iniciaron el pasado lunes sin más contratiempos que la rueda de prensa de Arturó Torró apuntándose el tanto del supuesto descontento.

De paso, otra cuestión, la del comercio de la ciudad, sufridor de la crisis como el que más, a lo que se agregan ahora las obras: una desgraciada coincidencia cuya solución parece difícil si no imposible si se quiere cumplir con los plazos establecidos.
Tras la andanada populista, el gobierno se ha visto obligado -una vez más- a ir a remolque de aseveraciones cuando menos inexactas por parte del principal grupo de la oposición.
Las cuentas del Centre Històric parecen estar detrás de toda la cuestión pero habrá que decir que el gobierno municipal tarda ya tres años en explicar lo que sucedió durante el mandato de Arturo Torró en esa asociación. Ya va siendo hora de que se diga lo que hay y se cierre de una buena vez este asunto, en el que este semanario ha insistido desde entonces.

Finalmente, la web municipal, donde el Bloc ha abierto la caja de las sorpresas por la “utilización partidista” por parte del gobierno al colgar en la página de inicio respuestas o comunicados que hacen referencia a críticas de los nacionalistas o del PP sin que pueda hallarse el origen de tales comunicaciones, es decir las palabras de la oposición.
Para empezar, visto lo visto, demuestra muy poca inteligencia el responsable político de la comunicación municipal: bastaría que en vez de hacer referencia a las críticas de los demás, los comunicados del gobierno se construyeran “en positivo” para despejar toda duda de trato desigual a la información generada por unos y otros. Y es que tal y como están las cosas, tiene razón el Bloc cuando, ante la respuesta gubernamental de que “los partidos tienen su propio espacio en la web y que no ha sido utilizado por el Bloc en los últimos dos años”, los nacionalistas dicen que para llegar a esa página hacen falta al menos cinco “clics”, mientras la información oficial se encuentra en la página principal de la web gandia.org.

El gobierno municipal no puede quejarse: sus propios errores de comunicación le facilitan el trabajo al oponente.
Para más inri se inventa un eslogan local del Plan E que se las trae: Y es que Una bona obra parece hecho a la medida del Opus Dei.

No hay comentarios: