martes, 20 de enero de 2009

Obras contra la crisis

Tanto por el volumen de lo anunciado, como por la lista de emprendimientos, se entiende que en la cabecera del comunicado oficial se diga que tales obras están destinadas a crear ocupación
Con la presentación de los presupuestos de la empresa municipal Iniciatives Públiques de Gandia para este año, con un total de 53 millones de euros, se pone en marcha, al menos en los papeles, una serie de inversiones que, sumadas a las del “plan Zapatero”, y a las propias del ayuntamiento de la ciudad, el que sin duda es el más ambicioso plan de obras y servicios de todos los tiempos.
Tanto por el volumen de lo anunciado, como por la lista de emprendimientos, se entiende que en la cabecera del comunicado oficial se diga que tales obras están destinadas a crear ocupación, generar inversiones productivas y ayudar a las personas más afectadas por la actual situación económica”.
Por lo pronto, este acuerdo adoptado por el Consejo de Administración de la empresa pública ha tenido la oposición del PP y Bloc en cuanto a la suscripción de un préstamo de 30 millones de euros para este año, con el objeto de financiar todas las inversiones, junto al ya contratado en 2008 de otros 19 millones, mientras algunas de las iniciativas, como el plan de vivienda social, han sido enteramente rechazadas por la oposición.
El alcalde de Gandia en su comparecencia ante los medios, tras la reunión del ente, explicó en rueda de prensa su punto de vista respecto a las causas de esa oposición tanto del PP como del BNV, resumiéndolo en que “seguramente intentarán una vez más el discurso de la falta de transparencia en la actuación del Gobierno Municipal, pero les hemos explicado en detalle lo que vamos a hacer y aún así han preferido votar en contra, en algún caso sin dar explicaciones al punto que hemos tenido que preguntarles -invirtiendo los papeles- las razones de su voto”.
Como quiera que sea, en el tema colea la negativa de populares y nacionalistas a aceptar un esquema de empresas públicas donde se sienten mal representados y al albur de la información que el gobierno quiera o no proporcionarles en cada momento.
Sea como fuere, lo importante ahora pasa por saber si todo el cronograma de obras podrá cumplirse dentro de los plazos previstos, habida cuenta de que en algunos casos, apenas si se cuenta con proyecto definido, así como las aportaciones que otras administraciones puedan realizar una vez comprometido el gasto.
Lo bien cierto es que restan dos años y medio para el final de la legislatura y que, semejante volumen de obras puede tener su contrapartida en las dificultades que pueden crearse a los vecinos durante el tiempo de la obra.
Otra cosa es el endeudamiento que tal plan supone para la empresa pública, aunque el Alcalde se haya empleado a fondo en explicar que de lo que se trata es de un doble objetivo: mejorar la ciudad y ayudar a que la economía local se impulse para salir de la crisis.